Un año sin electricidad tiene la vivienda de una abuela de 70 años que vive en San Jacinto

 La casa de la anciana está sin energía eléctrica desde el 24 de abril de 2023, debido a que una sobrecarga incendió el cable que le suministra el servicio.

Hace un año y cuatro meses la vivienda de la señora Berta Elena, de 70 años, se encuentra sin electricidad, debido a que una de las frecuentes bajadas y subidas de voltaje que ocurren en la ciudad causó el incendio del cable de alta tensión que proporciona el servicio a su casa.

El sitio donde habita la abuelita, hace 30 años, está sin energía eléctrica desde el 24 de abril del 2023, debido a que una sobrecarga hizo que la línea que va del poste F17B11 a su hogar, ubicado en la avenida 05 del sector 18 de San Jacinto en Maracaibo, se quemara por completo. 

“En uno de los tantos bajones eléctricos que hay a diario el cable que va del poste a mi casa, que es la número treinta y cuatro se prendió en fuego y quedó hecho cenizas. Eso fue hace un año y cuatro meses, desde entonces le he planteado el caso a los del consejo comunal, lo reporté por la aplicación del gobierno y hasta fui a Corpozulia, pero me dijeron que tenía que llevar una carta, total que no he conseguido solucionar mi problema”, detalló la septuagenaria.

Elena precisa que reportó su caso en la aplicación VepApp en noviembre del pasado año, al cual el sistema le asignó el número ST-3528494.

“Después de que hice el reporte los trabajadores de Corpoelec vinieron, midieron y me dijeron que para ponerle luz a mi casa necesitaban sesenta y cuatro metros de cable que es costosísimo, pero ellos no lo tenían y no me pudieron solucionar”, indicó Elena.

El único inmueble afectado en la zona por esta falla es el de Berta Elena. “Una vecina me dio un arrimo para prender los abanicos y las luces, porque como el voltaje es tan bajo no prendo ni la neverita, que es lo único que tengo no se me vaya a quemar también”, señaló la jubilada que vive con una sobrina en el populoso urbanismo.

A la falta de energía eléctrica que agobia a la señora Berta Elena, se suma la preocupación de que el poste de donde viene el cable está partido en la base, sostenido por unas agarraderas que están que se rompen y que pueden causar un desastre similar al que ocurrió hace algunos años, cuando la misma pieza se cayó tumbando al mismo tiempo al menos 5 postes más, lo que dejó sin servicio eléctrico a toda la urbanización por varias horas.

La abuela le hace un llamado a la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), así como también al general Néstor Reverol, presidente de Corpozulia, para que le donen los 60 metros de cable que necesita, y que de esta forma la empresa encargada del servicio pueda realizar la reparación correspondiente, para que su vivienda pueda volver a tener electricidad.